Abatida al encantador sombrero del sombrerero.
Asfixia de asuntos sin resolver,
que van y vienen,
nos mecen en embriagadores abrazos
de incansables sueños,
de insoportables deseos
y caigo abatida en un duelo que pierdo.
que van y vienen,
nos mecen en embriagadores abrazos
de incansables sueños,
de insoportables deseos
y caigo abatida en un duelo que pierdo.
Sabiendoamar
No hay comentarios:
Publicar un comentario